Consejos y tratamiento para el manejo de las fracturas

Por: Dr. Óscar García

Se considera a una fractura como abierta o expuesta, cuando el hueso tiene contacto con el exterior a través de una herida.Consejos y tratamiento para el

Alrededor de 1% de las fracturas son expuestas, y hasta en una tercera parte de los casos, el paciente tiene otras lesiones de importancia.

El hecho de que la lesión sea expuesta implica, por lo general, que fue producida por una fuerza de gran magnitud, y que además del daño en el hueso, existe uno en la piel, músculos, tendones e incluso en los nervios o vasos sanguíneos.

Habitualmente, el hueso al fracturarse se desplaza y daña los tejidos adyacentes, cuando esto incluye la piel se produce la exposición o salida del mismo.

En otros casos, como en las causadas por proyectil de armas de fuego, se produce de fuera a dentro.

Manejo de la lesión
El manejo inicial de este daño, implica el cubrir la herida con una gasa estéril húmeda o una tela, e inmovilizar la extremidad con algún tipo de férula, que puede elaborarse con una revista, un cartón, una tabla y una venda elástica o una tela con lo que se disminuye el movimiento en el área.

Si existe sangrado, éste se debe controlar con presión local y elevación del área, si esto no es suficiente, el paciente debe ser trasladado a un hospital para su manejo por un especialista.

Uno de los principales riesgos de una fractura expuesta es la infección, por lo que, además de la evaluación completa del paciente, debe iniciarse la administración de antibióticos, la profilaxis contra el Tétanos y la toma de radiografías.

Plan de tratamiento definitivo

1) Aseo y lavado de la herida, retirando cualquier cuerpo extraño
2) Retirar todo el tejido muerto
3) Estabilización o fijación de la fractura, que puede ser con yeso, clavos, placas y tornillos
Estas lesiones requieren de mayor tiempo para cicatrizar o muchas veces no lo hacen y, en algunos casos, puede generar deformidad y que la extremidad pierda parte de su función en forma permanente.