Lentes esclerales, ideales para ojos sensibles 

Por: Dr. David Méndez
Los lentes esclerales son lentes de contacto que ayudan a pacientes con córneas irregulares, córneas muy sensibles u ojo seco. Estos lentes están hechos de un plástico rígido que sienta sobre la esclera (la parte blanca del ojo) y no sobre la córnea (la parte transparente del ojo), el cual sobresalta o sobrepasa la córnea y proporciona una superficie regular de protección sobre ella.
La función principal de los lentes esclerales es brindan una corrección óptica significativa para los pacientes con enfermedades en la córnea que afectan la superficie y/o sus curvaturas. El mayor porcentaje de los pacientes afectados tienen enfermedades como queratocono, queratoglobo, degeneración marginal pelúcida, ectasias corneales y las secundarias a cirugías refractivas, mayoritariamente operaciones de láser como LASIK que no salieron bien. Estudios han mostrado que lentes de contacto que aplican cualquier tipo de compresión sobre la córnea, inducen lesiones sobre él, lo cual con el tiempo podría causar cicatrices corneales. Pacientes con astigmatismos muy elevados, síndrome de Sjögren, síndrome de Stevens-Jhonson, cicatrices corneales, defectos epiteliales, ojo seco, entre otros, pueden beneficiarse también porque debido a su material y diámetro más grande, deja un espacio entre el lente y la córnea, permitiendo que no haga contacto con ésta última. Este espacio se rellena de una solución que permite neutralizar las irregularidades que existen en la superficie, se mantiene húmeda la córnea, ayuda a las cicatrizaciones corneales, la calidad de la visión mejora, y en ciertos casos, hasta retrasa la necesidad de un trasplante corneal. Estos lentes son cómodos, ya que se apoyan en la esclera, que es menos sensible que la córnea, y se pueden usar durante muchas horas al día, proporcionan una mejor visión que los lentes convencionales, se ajustan muy bien al ojo y no acumulan materiales extraños en su interior.
Al ser de mayor tamaño, son más fáciles de manipular, introducir en el ojo y limpiar. Son muy permeables, por lo que entra más oxígeno a la córnea. Diversos estudios demuestran su efectividad en la corrección óptica del astigmatismo en el queratocono, junto con el tratamiento de Cross-Linking, se ha demostrado que se logra una adaptación exitosa con una mayor personalización en el proceso.